Recientemente cumplí 31 añitos, es curioso pero hasta hace bien pocos años nadie consiguió enseñarme a no mirar para otro lado. Nadie consiguió hacerme ver que si es posible empatizar y ayudar por uno mismo a gente que ves durmiendo en la calle, buscando en las basuras o durmiendo en cajeros.
Ahora miro hacia atrás y no puedo evitar sonreír (yo era muy diferente...). Tengo claro que una parte en mi interior estaba profundamente dormida, esperando a despertar en el momento exacto en el que yo experimentase y descubriese algunas de las más importantes cosas de la vida por mí mismo.
La realidad es que sobre estos temas yo nunca quise aprender. Siempre "pensé" que esas cosas de ayudar estaban muy bien pero que simplemente no iban conmigo, que para eso ya estaban las ONG y que además, suficientes problemas y preocupaciones en mi vida diaria tenía yo ya encima como para preocuparme por más cosas aún.
Ahora miro hacia atrás y no puedo evitar sonreír (yo era muy diferente...). Tengo claro que una parte en mi interior estaba profundamente dormida, esperando a despertar en el momento exacto en el que yo experimentase y descubriese algunas de las más importantes cosas de la vida por mí mismo.
Cuanto tiempo he perdido y cuánta razón Galileo :). Un abrazo a todos!.
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